América Latina con alerta epidemiológica por alza en casos de fiebre amarilla
Entre el 2024 y lo que va de 2025 en Bolivia, Brasil, Colombia y Perú se registraron 78 casos de fiebre amarilla, de los que 37 murieron. Cifras que superan los 58 casos positivos y 28 muertes que ocurrieron entre el 2022 y 2023.
A partir de estos datos, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) emitió una alerta epidemiológica sobre la fiebre amarilla en las Américas. La alerta no solo responde al incremento sino, también, a un cambio en la distribución geográfica de la enfermedad.
Sobre este último punto, la OPS explicó que, en 2025 se observaron casos en regiones de Brasil y Perú, donde no se tuvieron en el 2024, por lo que se pronosticó que más países puedan verse afectados.
La fiebre amarilla es una enfermedad viral grave y potencialmente mortal, sobre todo en su forma más grave.
La OPS enfatizó que la vacunación es una de las herramientas más escenciales para prevenir y controlar la fiebre amarilla. En 2024, la mayoría de los casos registrados correspondieron a personas que no habían recibido la vacuna.
El organismo instó a los países a seguir reforzando sus programas de vacunación, así como a tomar las medidas adecuadas para informar y proteger a los viajeros que se dirigen a zonas de riesgo.
Además, ante los cambios que se observaron en los patrones de transmisión, la OPS hizo las siguientes recomendaciones:
Refuerzo de la vigilancia: Detectar rápidamente cualquier caso sospechoso, incluso en áreas no tradicionalmente afectadas.
Vacunación universal: Asegurar que al menos el 95% de las personas en áreas de riesgo estén vacunadas.
Diagnóstico por laboratorio: Realizar diagnóstico virológico mediante PCR en los primeros 7 y hasta 10 días de enfermedad, o ELISA IgM en fase convaleciente con interpretación cuidadosa debido a la reactividad cruzada en áreas con otros flavivirus circulando.
Manejo clínico: Fortalecer la detección temprana y el seguimiento especializado de los pacientes graves como una medida clave para salvar vidas.
Preparación ante brotes: Revisar y actualizar el inventario nacional y subnacional de vacunas para planificar una respuesta rápida ante emergencias.
Desde 1970, la fiebre amarilla ha resurgido como una amenaza para la salud pública en las Américas.
La enfermedad es endémica 13 países y territorios de la región, generando brotes y muertes. En 2014, el virus salió de los límites de la Amazonia. Algunos atribuyen este proceso al cambio en la interacción entre monos, mosquitos y humanos.