Clausuran en Chiapas 3 plantas extractoras de aceite de palma y un pedio de extracción mineral ilegal
Cooperativa Unión de Palmicultores de la Costa de Chiapas, Pakal Consultores en Agronegocios del Sureste, Aceitera Chiapaneca La Palma Sociedad de Producción Rural de Responsabilidad Limitada y el predio El Caribe fueron clausurados
Como parte de las acciones de inspección y vigilancia en fuentes generadoras de descarga de aguas residuales y en operaciones de extracción minera ilegal, la Profepa en Chiapas realizó cuatro clausuras:
Tres plantas extractoras de aceite de palma que descargaban en forma irregular aguas residuales y un predio de extracción ilegal de mineral fueron clausurados en Chiapas.
El pasado 14 de abril, inspectores de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) realizaron una visita de inspección a la empresa denominada Cooperativa Unión de Palmicultores de la Costa de Chiapas, ubicada en el municipio de Acapetahua, donde detectaron que no cuentan con permiso de descarga de aguas residuales.
Tampoco cuenta con especificaciones técnicas del sistema de tratamiento, carecen de informes de monitoreo, no cuentan con medidores y puntos de muestreo y hay infiltración de aguas residuales no tratadas al suelo natural y terrenos aledaños.
Por lo anterior, se impuso una clausura temporal parcial a la planta extractora de aceite de palma; asimismo se dictaron diversas medidas de aplicación urgente con la finalidad de prevenir riesgos ambientales por el manejo inadecuado de aguas residuales industriales.
En una segunda acción el 15 de abril, la Procuraduría realizó una visita de inspección en materia de descarga de aguas residuales a la empresa Pakal Consultores en Agronegocios del Sureste, ubicada en el municipio de Villa Comaltitlán y encontraron las siguientes irregularidades:
Carecen de permiso de descarga, no presentaron la documentación que acredite el adecuado tratamiento y monitoreo de calidad y volumen de descarga de las aguas residuales, son omisos en el pago de derechos y sus aguas residuales se infiltran al suelo natural.
Por lo anterior se impuso la medida de seguridad de clausura temporal parcial de las instalaciones en el área correspondiente a la fuente generadora de aguas residuales. Asimismo, se le impusieron diversas medidas de aplicación urgente para la reducción del riesgo ambiental.
En una tercera acción, el pasado 16 de abril, inspectores realizaron una visita de inspección en materia de descarga de aguas residuales al establecimiento Aceitera Chiapaneca La Palma Sociedad de Producción Rural de Responsabilidad Limitada, ubicado en camino rural al Pataste al Ejido 15 de abril, en el municipio de Acapetahua, Chiapas.
Durante la visita se detectaron irregularidades documentales y en el manejo de aguas residuales generadas.
Además, no cuentan con título de concesión, permiso de descarga, no tienen especificaciones técnicas de sistema de tratamiento, ni informes de monitoreo de aguas tratadas, no presentan los pagos de derechos federales ni cuentan con registros del volumen y calidad de las descargas realizadas entre enero de 2024 y abril de 2025.
También se constató que las aguas residuales industriales generadas por el proceso de extracción no están recibiendo el tratamiento adecuado, lo que ha provocado su infiltración y vertido al suelo natural, bajo la laguna de oxidación y en terrenos aledaños.
Ante estos hechos se impuso como medida de seguridad la clausura temporal parcial de las instalaciones, específicamente de la planta extractora de aceite de palma, y dictaminó medidas de urgente aplicación para reducir los riesgos ambientales derivados del manejo inadecuado de aguas residuales.
De acuerdo con el artículo 121 de la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente, la descarga de aguas residuales sin tratamiento representa un riesgo ambiental significativo. Estos residuos contienen contaminantes como nitrógeno, fósforo, materia orgánica y bacterias coliformes fecales que deterioran la calidad del agua y el suelo, afectan la salud de la población y alteran la biodiversidad y la estabilidad de los ecosistemas.
En una cuarta intervención, la Profepa clausuró todas las actividades relacionadas con la extracción de barita en el predio El Caribe, ubicado en el municipio de Chicomuselo.
El 14 de abril, la Profepa coordinó un operativo interinstitucional contra la minería ilegal donde participaron elementos de la Guardia Nacional, la Sedena, la Secretaría de Seguridad de la entidad y la policía municipal en el lugar antes mencionado y se constató la extracción de material mineral conocido como barita en una superficie de aproximadamente 180 hectáreas, sin contar con la autorización de cambio de uso de suelo en terrenos forestales emitidos por la Semarnat.
Por lo anterior, se impuso como medida de seguridad la clausura temporal total del predio inspeccionado; asimismo, se aseguró una máquina empleada en los trabajos de extracción.
La Profepa realizará un procedimiento administrativo e impondrá sanciones conforme a la normatividad ambiental vigente.
La explotación de recursos minerales requiere de una evaluación previa de impacto ambiental y la correspondiente autorización federal, especialmente cuando las actividades se desarrollan en zonas forestales o de alta importancia ecológica.
La minería puede generar afectaciones graves al suelo, cuerpos de agua, flora y fauna, así como al bienestar de las comunidades aledañas.
