G20 no logra cerrar la brecha de ambición climática de 1.5 °C para 2035: Greenpeace
Diez años después del Acuerdo de París, Greenpeace Internacional presentó un nuevo informe en la COP30, que revela la insuficiente ambición climática en las Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (NDC) para 2035 de los países del G20.
El informe, “Brecha de Ambición Climática para 2035”, se presentó en la conferencia de la ONU sobre el cambio climático en Belém como parte del llamado de Greenpeace a los gobiernos para que acuerden un Plan de Respuesta Global que garantice que el límite de 1,5°C siga siendo alcanzable.
Tracy Carty, experta en política climática de Greenpeace Internacional, declaró que “cuando los países del G20 —responsables del 80% de las emisiones globales— presentan una ambición colectiva peligrosamente insuficiente, el mundo tiene un problema. Con el 85% de la economía mundial detrás, las decisiones del G20 moldean el comercio, la inversión y la tecnología a nivel global”
Y agregó, “sus decisiones determinarán el éxito o el fracaso del objetivo de 1,5°C, pero sus planes representan apenas una reducción del 23% al 29% de las emisiones, en comparación con la reducción del 60% necesaria a nivel mundial”.
Dada su responsabilidad histórica en materia de emisiones y su mayor capacidad de acción, los países desarrollados del G20 deberían liderar la reducción de emisiones, superando con creces el promedio mundial necesario del 60%. Sin embargo, en conjunto, las NDC de los países desarrollados del G20 representan solo una reducción del 51% al 57% con respecto a los niveles de 2019, lo que supone un fracaso rotundo en el liderazgo por parte de quienes deberían impulsar la ambición global.
El análisis de Greenpeace también evaluó el contenido energético de las NDC del G20 y concluyó que ninguna de ellas cuenta con planes creíbles para eliminar gradualmente los combustibles que impulsan la crisis climática.
“Los países del G20 albergan a los mayores productores y consumidores mundiales de combustibles fósiles, los cuales impulsan la crisis climática; sin embargo, ninguna de sus NDC para 2035 incluye planes creíbles para su eliminación gradual. Los países desarrollados, en particular, tienen la mayor responsabilidad de liderar y actuar primero, pero sus NDC están muy lejos de cumplir con lo que exigen la ciencia y la equidad”, añadió Carty.
Jasper Inventor, subdirector de programas de Greenpeace Internacional, declaró que “en esta COP, luchamos por un Plan de Respuesta Global para cerrar la brecha en el objetivo de 1,5°C. Este plan debe incluir una hoja de ruta para la eliminación gradual de los combustibles fósiles y un plan de acción para poner fin a la deforestación. Hemos visto avances en la primera semana, pero necesitamos un resultado que genere un cambio real y no solo otra hoja de ruta sin rumbo”.
“Debemos asegurar que la COP30 conduzca a acciones urgentes para la eliminación gradual de los combustibles fósiles y la aceleración de las energías renovables. Pero también debe generar avances en la financiación climática, que es crucial, incluyendo medidas para que los contaminadores paguen por los daños climáticos y una transición justa. La COP30 debe lograr un resultado que acelere la acción concreta”, concluyó.



