Ambientalistas demandan a México posición ambiciosa en Tratado Global de Plásticos
La organización ambientalista Greenpeace México acudió esta mañana a la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) para hacer un llamado contundente a que México mantenga una posición ambiciosa para un Tratado Global de Plásticos durante la próxima ronda de negociaciones del Comité Intergubernamental de Negociación (INC).
Estas discusiones -que tendrán lugar del 5 al 14 de agosto del presente año en Ginebra, Suiza- son pieza clave para que México, a través de la SRE, continúe impulsando la protección de los océanos.
“En estos momentos es necesario mostrar la mayor voluntad posible por parte del gobierno de México para asegurar que se logre un Tratado fuerte que ponga límites a la producción de plásticos y a las empresas contaminantes y que proteja la salud humana y la del planeta”, señaló Ornela Garelli, directora de Campañas de Greenpeace México.
Y agregó, “sabemos que México ha manifestado públicamente una posición favorable a este Tratado, pero la ambición no puede bajar, por ello debemos recordarles que Greenpeace y la ciudadanía mexicana estamos atentas a que se logre este Tratado a través de la entrega de estas 90 mil firmas. Se trata de un mandato ciudadano”.
A través de una protesta pacífica, la organización hizo entrega de un documento en el que se plasman 90 mil firmas de personas que han alzado su voz a favor de un Tratado de Plásticos que sea capaz de solucionar el problema de los plásticos durante todo su ciclo de vida, incluidos los de un sólo uso y el daño que generan a los ecosistemas y la salud humana.
Un Tratado Global de Plásticos para una Ley Anti-plásticos
Como parte de esta demanda, Greenpeace México solicitó también que la delegación mexicana que será partícipe en las próximas negociaciones de la INC 5.2 (segunda parte de la quinta sesión del Comité) garantice la consecución de un Tratado jurídicamente vinculante.
Para ello deberá involucrar desde la fase de extracción de petróleo para la generación de productos plásticos, hasta el tema de su disposición final, en vertederos y basureros a cielo abierto, generalmente tóxicos y con múltiples impactos sociales y ambientales.
El propósito central de esta ronda será continuar con las discusiones que no lograron concretar un acuerdo final durante la primera parte, la cual tuvo lugar en Busan, Corea del Sur, entre noviembre y diciembre del 2024.
Para esta nueva fase, se espera contar con un escrito acabado del Tratado en el que se aborde el ciclo de vida completo del plástico, desde su producción hasta su eliminación, y se incluyan medidas, tanto globales como nacionales, que generen cambios profundos en tales etapas.
Este punto resulta imprescindible, pues es el elemento que reforzará las bases legales para que a nivel nacional sea posible adoptar medidas concretas para erradicar el problema de los plásticos de raíz, el cual involucra principalmente al sector empresarial e industrial de estos productos.
Para ello, es necesario impulsar y asegurar la reforma a la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos (LGPGIR) e implementar, con ello, una Ley Anti-plásticos que reduzca la contaminación por plásticos a través de los siguientes puntos clave:
La prohibición de los plásticos de un solo uso en todo el territorio nacional
La Responsabilidad Extendida del Productor (REP), que señala que los productores e importadores de los productos plásticos se hagan cargo de la gestión completa de su ciclo de vida.
La promoción y adopción de sistemas de reutilización y refill como alternativa a los productos desechables.
La eliminación de falsas soluciones, como la incineración de residuos plásticos que sólo genera más contaminación.
“Las empresas tienen que apostar por el ecodiseño pero también asumir responsabilidades mucho más amplias, como financiar la recolección de los residuos o contar con sistemas de reutilización y refill implementados en sus productos”, mencionó Garelli.
