Día Mundial de la Diabetes: En México prevalece incidencia y mortalidad
La diabetes se mantiene en México como la segunda enfermedad más mortal, al registrarse como la causa de muerte de 110 mil 059 personas en 2023, mientras que en el primer trimestre de 2024 costó la vida de 30 mil 501 más, de acuerdo al Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
La diabetes como segunda causa de muerte en este país se mantiene desde hace varios años; en 2022 también se ubicó en ese lugar, al ser la causa del fallecimiento de 115 mil 025 personas.
En México, más del 90 por ciento de los casos corresponden a diabetes tipo 2, en la cual el organismo tiene dificultades para usar adecuadamente la insulina, lo que aumenta los niveles de glucosa en la sangre si no se trata de manera oportuna.
Con estas cifras, México se encuentra en el quinto lugar a nivel mundial en prevalencia de diabetes tipo 2, afectando a más de 12 millones de personas, según la Federación Internacional de Diabetes (IDF). La obesidad, que afecta al 72 por ciento de la población adulta en México y es un factor de riesgo clave que incrementa las probabilidades de desarrollar diabetes tipo 2 y complicaciones graves asociadas.
Ocupación hospitalaria por diabetes
En cuanto la ocupación hospitalaria por diabetes y representa un reto para el sistema mexicano de salud pública.
Hasta el tercer trimestre de 2024 se registraron al sistema de salud un total de 33 mil 965 ingresos de pacientes con diagnóstico de diabetes mellitus tipo 2 (DMT2), siendo los estados de Tabasco (4 mil 231), Jalisco (3 mil 031) y Ciudad de México (2 mil 348) los que reportaron el mayor número, de acuerdo al Sistema de Vigilancia Epidemiológica Hospitalaria de la Secretaría de Salud. Esto significa un incremento del 5.5 con respecto al mismo periodo de 2023.
El 46.425 de los casos se registraron en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y el 44.90% en las unidades de la Secretaría de Salud; el resto se distribuyó en sistemas de salud pública como IMSS-Bienestar e ISSSTE o en el sector privado.
El 48.5% de los casos correspondió a pacientes del sexo masculino y el 51.4% a mujeres.
El grupo de edad más afectado fue el de los 55 a 59 años, en el caso de hombres, y de 60 64 años en los casos de mujeres.
El 49.04% tiene antecedentes de padres con diabetes mellitus y el 29.94% antecedentes de hermanos con la misma enfermedad.
Solo el 15.6% de los pacientes refirieron realizar actividad física al menos 30 minutos al día.
La hipertensión arterial constituyó la comorbilidad más frecuente reportada en los casos de DMT2, con 19 mil 555 (57.5%); seguida por la obesidad, presente en 4 mil 898 casos (14.4%).
El 32% (10 mil 880) reportó la presencia de alguna discapacidad por diabetes; de ellas la discapacidad visual fue la más frecuente, seguida de la motora.
Respecto a las defunciones, las causas infecciosas constituyeron la causa directa más frecuente reportada.
¿Qué produce la diabetes?
La diabetes mellitus es una enfermedad crónica que ocurre cuando el páncreas no produce suficiente insulina o el organismo no utiliza de forma adecuada la insulina que produce, una hormona que regula los niveles de glucosa en la sangre.
Este padecimiento, si no se controla, puede provocar hiperglucemia la cual, al paso del tiempo, daña órganos vitales como los nervios y vasos sanguíneos.
Existen varios factores de riesgo que aumentan la probabilidad de desarrollar diabetes, entre ellos: antecedentes familiares, obesidad, alimentación poco saludable, baja actividad física, hipertensión, tabaquismo, prediabetes o diabetes gestacional previa, así como ciertos factores genéticos, ya que las personas de ascendencia latina tienen una mayor predisposición a esta enfermedad.
La combinación de obesidad y diabetes reduce la esperanza de vida y aumenta el riesgo de desarrollar afecciones cardiovasculares, daño renal, deterioro cognitivo, problemas visuales e incluso amputaciones de miembros inferiores. Esta situación afecta la calidad de vida de las personas, quienes requieren un puntual seguimiento.
“El problema con el diagnóstico de la diabetes tipo 2 es que muchas personas no presentan síntomas al inicio. Cuando se manifiestan, estos pueden incluir boca seca o sed excesiva, fatiga, hambre constante, aumento en la frecuencia de micción, pérdida de peso o visión borrosa”, comentaron el doctor Antonio González Chávez, responsable de la Clínica para la Atención Integral al Paciente con Obesidad y la Dra. Olivia Pech, Médica especialista de la clínica.
“Es fundamental que las personas con obesidad o con otros factores de riesgo se realicen un tamizaje para detectar la diabetes a tiempo y comenzar su tratamiento cuanto antes. Actualmente, contamos con avances tanto en el monitoreo como en el tratamiento, incluyendo intervenciones de procedimientos de cirugía bariátrica-metabólica”, agregó el doctor González Chávez.
“La diabetes y la obesidad no son solo estadísticas; representan vidas y familias que enfrentan retos y gastos cada día. Animamos a todas las personas a informarse, a realizar revisiones periódicas y a acudir a centros de salud donde puedan recibir atención integral. La prevención es nuestra mejor herramienta contra esta epidemia silenciosa. Un estilo de vida saludable y la intervención médica oportuna pueden marcar una gran diferencia en la calidad de vida de cada persona afectada”, concluyeron los especialistas.
Diabetes se cuadruplica en el mundo
Según los nuevos datos publicados por The Lancet con motivo del Día Mundial de la Diabetes, el número de adultos que viven con diabetes en todo el mundo ha superado los 800 millones, es decir que la cifra se ha cuadruplicado desde 1990.
El análisis, realizado por NCD Risk Factor Collaboration (NCD-RisC) con el apoyo de la Organización Mundial de la Salud (OMS), pone el acento en la magnitud de la epidemia de diabetes y en la necesidad urgente de adoptar medidas más enérgicas a escala mundial para hacer frente tanto al aumento de las tasas de la enfermedad como a la brecha terapéutica cada vez mayor, en particular en los países de ingreso mediano bajo.
“En los últimos tres decenios, hemos asistido a un incremento alarmante de la diabetes, que es el reflejo del aumento de la obesidad, a lo que hay que sumar los efectos de la comercialización de alimentos poco saludables, la falta de actividad física y las dificultades económicas”, declaró el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus.
“Los países deben adoptar urgentemente medidas para controlar la epidemia mundial de diabetes. Y esto pasa por promulgar unas políticas que promuevan una alimentación saludable y la actividad física y, sobre todo, por disponer de unos sistemas de salud que ofrezcan servicios de prevención, detección temprana y tratamiento”, demandó.